El trabajo de buscar trabajo

Dicen que no hay nada más inútil que pedirle que no llore a alguien que está llorando. Seguramente ocurrirá lo mismo si en este momento le dices que no se desespere a alguien que busca su primer empleo. La tarea de abrirse el primer hueco en el mundo del trabajo nunca ha sido fácil, y desde luego ahora tampoco lo es. Se trata de no perder de vista esta realidad, pero también de evitar por todos los medios ser pesimistas.

Vale, no es el mejor momento, pero todos sabemos que siempre hay un sitio. Tal vez no sea tu trabajo ideal, ni el sueldo que necesitas, pero fijar el listón por encima de tu cabeza sólo te hará sentir frustrado.

Te damos algunas ideas para afrontar la búsqueda de empleo:

No hay oportunidades malas. Nunca sabes dónde puede estar tu sitio, ni qué posibilidades de aprendizaje y promoción te puede ofrecer una empresa. Lo mejor de ser joven es que, por mucho que hayas estudiado, tienes mucho que aprender.

Trabajar es bueno para buscar trabajo. Se dice que “dinero llama dinero" y que nada nos hace más atractivos que tener pareja. Con el trabajo pasa lo mismo. Trabajar te mantiene activo y atento, te permite conocer otras personas que tal vez estén en la misma situación. Ampliar tu red de contactos puede ser mucho más eficaz que encerrarte en casa delante de una web de empleo.

Buscar trabajo lleva trabajo. Tanto si buscas empleo por primera vez como si has perdido el que tenías o necesitas un cambio, la fórmula es la misma. Organízate y ponte en marcha. Dedica la jornada a lo que es tu trabajo actual: buscar trabajo. Nada de lamentarse: emplea tu energía en alcanzar tu objetivo.

Internet es mucho más que tres webs de empleo. Utiliza esta macroherramienta para recopilar nombres de empresas donde podrías trabajar y correos de contacto. Es más efectivo enviar tu curriculum a tres departamentos interesantes, que cien mil a diestro y siniestro.

No te cortes. Toma la iniciativa y ponte en contacto con las empresas. Una persona que de entrada se muestra activa es un candidato interesante. Además, ¿qué tienes que perder?

Moviliza tu entorno. Que todos sepan que buscas trabajo. Familia, amigos, compañeros y profesores de la facultad. Siempre hay alguien que conoce a alguien.

Acepta consejos y nuevas posibilidades. No todos los trabajos son una silla y un horario. Contempla otras posibilidades, como colaborar puntualmente con una empresa.

Cuídate. Tal vez te parezca una tontería, pero arreglarte te ayudará a encontrarte mejor. Además, ahora no puedes decir que no tienes tiempo para hacer deporte. Aliviarás tensiones y te ayudará a pensar en positivo.