Los defensores del universitario plantean cambios para la mejora de la educación
Los defensores universitarios españoles, reunidos en la universidad de Cantabria la semana pasada, manifestaron su apoyo al Estatuto del Becario y la necesidad de una reforma educativa acorde con la situación del estudiantado.
El VIII Encuentro Estatal de Defensores Universitarios ha reunido a 44 representantes de las instituciones españolas para abordar los problemas comunes a los que se enfrentan en su actividad diaria, así como algunas de las cuestiones que son competencia de las autoridades educativas suprauniversitarias. Los defensores universitarios del estado español han concluido que es estrictamente necesario que el nuevo Estatuto del Becario establezca la obligatoriedad de que toda beca o contrato establecido por cualquier entidad de nuestro país considere a los investigadores como personal en formación en los términos previstos en el citado Estatuto.
Los defensores manifestaron su apoyo a los términos del acuerdo suscrito en junio entre el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) y la Federación de Jóvenes Investigadores que originó el Estatuto del personal investigador en formación, que tiene prevista su entrada en vigor para enero del 2006. Según los representantes universitarios `el Estatuto actualmente vigente supuso un avance respecto a la situación anterior pero, al dejar libertad a la entidad convocante para aplicar o no a sus becarios las condiciones del documento, ha resultado de muy escasa aplicación salvo para los becarios de la Administración central´. Por ello, recomiendan que la consideración de los investigadores como personal en formación sea de carácter obligatorio.
Por otro lado, los 44 representantes reconocieron el avance que supone la existencia de un Estatuto del Estudiante, donde se recogen los derechos y deberes del alumno, pero hicieron hincapié en la necesidad de establecer una línea de actuación para solventar las situaciones de conflicto. Asimismo, abogaron por la derogación del Reglamento de disciplina académico de 1954 por estar obsoleto.
Otra de las preocupaciones trabajadas en el encuentro fue la carencia que se aprecia en muchas universidades de instrumentos que permitan combatir la baja calidad docente de algunos profesores, ocasionada en parte por la dispersión de competencias y la ausencia de líneas de actuación.
Durante el encuentro se analizaron también los retos de futuro que afectan a la enseñanza superior y sus efectos sobre el estudiantado. Para los defensores las universidades deberían adaptarse a la situación de todos los tipos de estudiantes que reciben y efectuar un cambio cultural que se plasme tanto en nuevas regulaciones normativas como en las actitudes hacia las necesidades estudiantiles.
Los defensores sugieren que las resoluciones del MEC concreten mejor las carencias observadas en la formación de los candidatos a la homologación de títulos extranjeros, y que las universidades publiciten adecuadamente las condiciones para realizar las pruebas de conocimiento. Se debatieron también varios informes internos referidos a asuntos como la obligatoriedad de la asistencia a clase, el tratamiento de datos personales o el acceso a la universidad de estudiantes extranjeros.
-
Castelló de la Plana